El Amor es la energía que Dios usa para mantener organizadas sus creaciones. Cuando nosotros utilizamos esa misma energía, trabajamos directamente con Él-Ella: generando paz, tranquilidad, salud perfecta, abundancia, fortaleza, entereza, amor, y confianza en la Providencia Divina.
Cuando sufrimos, cuando vivimos dentro del conflicto, cuando en nuestras vidas se dan problemas, es porque nos hemos desconectado del amor. Los Ángeles son seres espirituales cuya esencia divina es el amor y por lo tanto, ellos nos pueden enseñar el camino de regreso al amor.
Ellos nos pueden ayudar a codificar cualquier situación dolorosa, confusa, o negativa en la frecuencia vibratoria del amor. Cuando, nosotros nos abrimos a cooperar con los Ángeles en el establecimiento de este nuevo código amoroso en la situación que nos duele o preocupa, esta situación empieza a estructurarse en forma diferente y empezamos a ser testigos de cómo se suaviza y cómo diferentes soluciones, que antes parecían imposibles, se hacen manifiestas.
Por lo tanto, si usted desea cambiar algo en su vida que hoy está causando sufrimiento, será imperativo que deje de lado su necesidad de victimizarse o de condenar, y haga una intención de luz y de llamado recio al amor.
Los Ángeles están en toda la capacidad de enseñarle lo que significa el amor, y las diferentes formas en que usted puede re-conectarse en este estado del ser para facilitar su vida y fluir en resultados que lo llenen de gozo.
Amados Ángeles, enséñenme el camino de retorno al amor. Pido su energía para rodear e impregnar esta situación (nombre aquí lo que hoy le duele o preocupa) de amor divino, puro e incondicional.
Yo soy parte de la mente de Dios, quien me creó con amor por lo que se que siempre mis asuntos y yo, podemos estar organizados armoniosamente en ese amor.
Estoy entera, íntegra y pena en todos mis sentidos, porque mis células y las moléculas que envuelven mi entorno, y a mi familia, vibran con la programación original de Padre, que es AMOR.
Gracias, gracias, gracias. Así es y hecho está.
En el nombre de Jesús,
Amén.