Todos tenemos un camino de vida, un plan que está con nosotros en el momento en que nacemos. Este camino de la vida nos ofrece experiencias que debemos vivir de la manera más amorosa y asertiva posible para que nuestra alma pueda evolucionar.
Nuestros ángeles nos ayudan a seguir nuestro destino en esta vida.
Sus dones son muchos e infinitos, e incluyen apoyo, amor incondicional, sanación, compasión, guía, ayuda para desarrollar nuestra confianza en nosotros mismos y desarrollo espiritual.
Tu relación con tus ángeles te ayudan a ver tu verdadero yo, no el del ego, sino quién eres como un ser espiritual y amoroso al nivel de tu alma.
Los ángeles siempre te ayudarán. Puedes recurrir a tus ángeles para cosas pequeñas y también para obtener ayuda con grandes desafíos, desde encontrar un espacio en un parqueo, hasta para abrir camino hacia adelante en tu trabajo; desde atraer una nueva relación, hasta sanar el pasado, descubrir el propósito de tu vida, y solucionar todo tipo de reto o cumplimiento de metas.
Los ángeles te aman incondicionalmente y no te juzgan. Si pides y confías, vendrán.
«Hablar» con los ángeles significa comunicación con tus aliados celestiales con todos tus sentidos. No necesitas «ver» a los ángeles, puedes ser consciente de ellos a través de tus sentidos. Puedes aprender a aumentar tus sentidos a través de mantenerte presente y despierto dentro de ti, de modo que puedas elevar tu vibración y tu conciencia.
Cuando nuestra vibración es alta, estamos más cerca de la vibración angélica y podemos comunicarnos con nuestros ángeles a través del color, el aroma, el sonido, el tacto, el gusto y la intuición.
Mi método favorito para comunicarme con ellos es a través de la meditación y los rituales, ya que ambos son un camino a los reinos angélicos. Permiten que tu intención y tu energía formen un enlace, como si estuvieras formando un cable de fibra óptica entre ustedes. Cuando estás conectado con tus ángeles, puedes comunicarte a través de todos tus sentidos y recibir amor, sanación, protección y más.
Una meditación es tiempo que pasas con tus ángeles, y puede durar desde un minuto hasta una hora; como el tiempo no tiene significado para los ángeles, un minuto puede parecer una hora, o vice-versa. No importa cuánto tiempo pases con tus ángeles, los rituales y meditaciones te ayudan a establecer una relación amorosa con ellos.
Amados Ángeles,
Los saludo con amor y alegría.
Pido su amorosa presencia para que me enseñen a desarrollar una relación estrecha y bondadosa con ustedes.
Me abro a su luz y a su ayuda.
Prestaré atención a sus señales y me abro a recibir su sabiduría y amor incondicional.
¡Gracias, gracias, gracias!
En el nombre de Jesús,
Amén.