Esta oración es una oración tradicionalmente judía que pide a cuatro Arcángeles protección durante la noche e incluye también al Ángel de la Liberación.

Cuando esté ya metido en su cama, y ha apagado la luz, diga esta oración:

Oración Nocturna con los Arcángeles

Amado Creador de Todo lo Que Es, gracias por este día que me diste, te lo agradezco de todo corazón. Ahora, antes de irme a dormir pido que en Tu misericordia envíes a tus Arcángeles a cuidarme mientras duermo:

 “Que el Arcángel Miguel permanezca en mi lado derecho, el Arcángel Gabriel que permanezca en mi lado izquierdo, el Arcángel Rafael permanezca detrás de mi y el Arcángel Uriel frente a mi y sobre mi cabezas permite la luz divina del Arcángel de la Liberación permanezca cerca de mi.

Gracias Padre, gracias Arcángeles, gracias, gracias, gracias.”

 Diga esta oración despacio y deliberadamente. Cada vez que pide por la presencia de cada uno de los Arcángeles, haga una pausa y visualice su presencia antes de continuar al siguiente Arcángel. Finalmente, visualice la luz blanca pura del Arcángel de la Liberación iluminando todo su ser y a los Arcángeles con amor, seguridad y protección.

En la mayoría de las noches, después de decir esta oración, se va a dormir rapidamente rodeado de la paz, la tranquilidad, el amor y la protección de  estos Arcángeles.

Si necesita guía divina sobre algún asunto, este es el momento ideal para contactar al Arcángel Gabriel ya que él-ella provee guía y abre la puerta a visiones y a sueños proféticos. Después de su oración, quédese platicando con el Arcángel Gabriel diciéndole sobre qué necesita guía. Pause por momentos, para permitirle al Arcángel Gabriel responderle (también es posible que le responda en sueños, o a través de un mensaje claro mientras duerme). Usted puede escuchar palabras, ver imágenes o tal vez sentir una sensación de calor y paz pasando sobre usted. Continúe la conversación hasta que haya cubierto todo lo que tenía que decirle. Agradézcale a Gabriel por haberlo escuchado y por actuar en su nombre. Respire profundo, lentamente y cuando exhale, hagase consciente de la presencia de los demás Arcángeles a su alrededor. Ahora puede dormirse con tranquilidad.