¿Cuál es el Propósito de su petición? Determine claramente por qué pide. El propósito determina el pedir. Si nuestra petición es indefinida, tibia, confusa y tímida, no lleva en sí la energía suficiente para viajar y dispersar sus semilla en el éter de la co-creación.
Atrévase a pedir lo que de verdad quiere. Muchísimas veces, pedimos por aquello que sentimos que deberíamos pedir, pero no es lo que en realidad va a llenar nuestro vacío.
Hay quienes me han preguntado, «¿Y si lo que quiero es dinero? ¿Puedo pedir dinero?» Y mi respuesta es esta: ¡Claro que se puede pedir por dinero! (El dinero es maravilloso, y mientras más declaramos lo mucho que nos gusta y lo hacemos sin pena, sin culpa y sin tapujos, mucho mejor), sin embargo en la mayoría de los casos, no es dinero el verdadero propósito detrás de la petición sino lo que se cree que el dinero va a traer consigo (paz, solución, alivio, alegría, descanso, prosperidad, oportunidad, poder, acceso, libertad…) Es allí donde es mejor no perderse y estar claros en el propósito real de la petición. En el caso de este ejemplo, el propósito real podría abarcar mucho más allá del dinero en sí.
Usted puede crear una petición honesta, apasionada y clara así:
“Creador de todo lo que es y será, mi ser (pensamiento, corazón y acción) se unen para comandar en mi vida (la paz, solución, alivio, alegría, descanso, prosperidad, oportunidad, poder, acceso, libertad) que necesito para ……… enséñame el camino. Así es y hecho está.”
O, si en realidad es dinero el propósito de su petición, puede crear una hermosa y poderosa petición así:
“Creador mío, estoy aquí con todo mi ser unificado (pensamiento, corazón y acción) para pedirte que me enseñes el camino hacia poder crear todo el dinero que necesito, ya que reconozco que es a través de Tí que obtengo el poder para crear riqueza. Todo y todos me prosperan, y yo prospero a todos y a todo. Que todo aquello que viene a mí venga desde la Luz, y en Tu nombre. Así es y hecho está.”
¡Esta forma de crear peticiones con propósito se aplica a cualquier otra parte de su vida! Cuando su propósito está claro, su oración adquiere poder y fuerza.
Y por favor, no se le olvide ser testigo de la respuesta que vendrá. De nada sirve pedir, si usted no va a estar presente y dispuesto a seguir la inspiración divina que sin duda, vendrá a usted. ¡Prepárese y espere lo mejor!
Gracias por leer,
Yvonne