Continuando con nuestro tema de cómo admitir y ser testigos de Milagros en nuestra vida, ¿cómo podría usted entonces decirle que Sí a Dios, a sus los regalos, a Sus milagros, y a Su Luz en en su Ser a pesar de que tal vez aquí y ahora su vida pueda parecerle llena de oscuridad y sin esperanza? Tal vez esté nutriendo pensamientos tales como “mi corazón ha sufrido mucho y no tiene ganas de abrirse”, ó “no siento que pueda abrir mi corazón, creo que es muy tarde”, ó “¿Cómo puedo yo encender la luz en mi corazón si mi vida pareciera un viaje interminble cuesta arriba?”.
Bien, si usted entra a un cuarto oscuro, tiene dos opciones: O se acostumbra a la oscuridad y encuentra todo a tientas, o bien busca la manera de encender una luz para poder ver. Usted elije. Usted es libre (aunque tal vez ahora no lo siente asi o se le haya olvidado), usted es libre de elegir encender la luz, o caminar a tientas.
Ahora, yo asumo que si está leyendo este artículo es porque siente un deseo real de encender su Luz y regresar a el Creador de Todo lo Que Es, en libertad y conscientemente. En mis próximas publicaciones le estaré compartiendo varios caminos o pasos por los que puede transitar para encender la Luz en su Corazón y empezar abrirlo. Hoy empiezo explorando los primeros dos pasos para abrir su corazón a los Milagros a pesar de que tal vez siente a oscuras su vida: (¡Cuando se siente a oscuras, es con mayor ímpetu, con mayor compromiso y con mayor pasión que debe salir en busca de la Luz de Dios y la suya propia!)
Paso 1: Intencione: Intención significa fuerza creadora, un propósito fuerte y claro de lograr algo específico. Este propósito viene desde el centro de su ser y va acompañado de determinación y una fuerza de voluntad fuerte que no va a permitir interferencia para lograr su objetivo. La intención clara unifica el alma, la mente, el corazón y el cuerpo en una misma dirección y dirige las acciones de la libertad. Si desea cambiar su vida, mejorarla y activar una nueva realidad para su vida, todo comienza con su intención de lograr esto. En este caso, su intención es la de abrir su corazón a los Milagros, llevar luz a su corazón, admitir a Dios dentro de su Ser.
Paso 2: Hága contacto con usted mismo: Hágase presente en su ser. Esto puede hacerlo fácilmente a través de la respiración consciente la cual le ayuda a tomar conciencia de que está vivo, presente, consciente y despierto. Yo le recomiendo que se tome pausas a través del día y ponga su mano en el corazón, mientras respira conscientemente.
Hoy le entrego tres ejercicios de respiración:
- Inhale tomando aire profundamente y dígase: «Yo sé que estoy respirando profundo” . Ahora, exhale fuerte, y dígase: “Yo sé que estoy exhalando profundo”. Este ejercicio le da aire a su corazón y le permite descansar de la angustia, del dolor, y del temor crónico.
- Inhale tomando aire profundamente y dígase: “Respirando profundo, estoy calmando mi cuerpo”. Ahora exhale profundo y dígase: “Exhalando profundo estoy sanando mi cuerpo”. Este ejercicio calma su cuerpo y le permite descansar y honrar su cuerpo. Puede imaginar como el aire llega a todos sus órganos.
- Ahora el tercer ejercicio de respiración, es para nutrirse con alegría y felicidad. Inhale tomando aire profundamente y dígase: “Respirando profundo, siento alegría”. Ahora exhale profundo y dígase: “Exhalando profundo siento alegría”. “Respirando profundo, siento felicidad”. Ahora exhale profundo y dígase: “Exhalando profundo siento Felicidad ”
- Sonría al final de cada ejercicio respiratorio. Sienta como su sonrisa se extiende a su corazón.