Aquí, le presento otra razón por la cual se le podría hacer difícil abrirse a recibir: ¡Trate de identificar si esta razón es una de las suyas y cree intenciones de luz para sanar todo aquello que no le permite recibir a manos llenas!:
2. La vergüenza: La vergüenza está íntimamente ligada a la mentalidad de escazes. La verguenza se define como una emoción dolorosa causada por un sentido muy fuerte de falta de valor personal, de sentir que no somos merecedores, pues hay algo erróneo en nuestra esencia. Es sentir que hay algo malo en la forma en que somos, y como si nuestra esencia fuera deficiente.
La verguenza de una de las más inquietantes emociones que una persona puede sentir. No hay otra emoción que sea tan profundamente destructiva pues al momento de sentir verguenza el ser interno se siente herido desde dentro de sí mismo.
La verguenza viene de haber sido enseñados que no valemos nada, que somos indignos, malos o algo similar.
Viene de cuando éramos niños, cuando algunos adultos nos dijeron cosas tales como: “Nunca vas a lograr nada”, “nunca llegarás a ser nada”, nunca hubieras nacido”, “sin-verguenza”.
También viene de la disciplina severa, cuando desde cada cinchazo, golpe oagresión verbal, el mensaje era: “no mereces respeto”
Viene también de todas las veces y las formas en que fuimos humillados por nuestros comportamientos.
Cuando hablo de sentir vergüenza, no hablo sobre el sentir verguenza de hacer algo mal. Estoy hablando sobre albergar en nosotros mismos la creencia y el sentimiento de que de alguna manera los que estamos mal somos nosotros, de que somos defectuosos, e inadecuados.
Es vital tomar consciencia de si siente verguenza de si mismo y en qué partes de su vida se siente así. Esto es muy importante de reconocer, y resolver, pues si usted siente verguenza de cualquier aspecto de si mismo esto lo imposibilita el permitir la circulación en su vida en el dar y el recibir, pues obviamente, estará viviendo dentro de mucha rigidez para no volver a ser avergonzado o bien para proteger su verguenza y no ser visto.
Si vivimos sin reconocer y liberar nuestra verguenza nuestro vínculo con el Creador de Todo lo Que Es se lastima y nos aleja de nuestra luz, y de nuestra posibilidad de crear nuevas opciones, posibilidades y contribución en nuestras vidas.
¡La abundancia se da cuando nos sentimos libres, poderosos y alegres, cuando vivimos en celebración de quién somos y de cómo somos!
Somos capaces de recibir cuando somos felices de ser quién somos, cómo somos.
Si desea sanar la verguenza en su ser, la invito a adquirir mi episodio de audio, en donde le ofrezco la oportunidad para sacar, cancelar y sanar las creencias limitantes y las heridas de su alma que sostienen la verguenza en usted, y los patrones traumáticos que se han creado en su ser por todas las veces, las formas y las vidas en que sintió verguenza.
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