Yo hoy le invito a restaurar su certeza de saberse amado, sostenido, escuchado e importante para Dios. Lo invito a conectarse con un punto de vista positivo de la vida y las bondades que puede encontrar en ella y a darse cuena de cuánta alegría y facilidad se niega a si mismo cada vez que elije la duda, la inmovilización, el miedo y la ignorancia.
Ábra su corazón, su mente y su cuerpo a la posibilidad de que la vida es generosa y bondadosa con usted, y que cualquier situación difícil que esté atravesando hoy, puede ser resuelta en un abrir y cerrar de ojos, si usted lo permite.