¿Sabía usted que la bondad es una frecuencia vibratoria que tiene sus propias caracterísiticas tales como ritmo, oscilación, vibración, energía y fuerza? (¡Al igual que usted!)
Cuando queremos escuchar la radio o cuando queremos ver la televisión, primero tenemos que sintonizarnos o ubicar la frecuencia adecuada para poder tener acceso a nuestros programas favoritos.
Lo mismo podemos hacer con la bondad. ¡Podemos ir a través de nuestra alma, libremente a buscar la frecuencia vibratoria de la bondad, y sintonizarnos con ella!
Para hacer esto usted puede seguir los siguientes pasos:
1. Cada día su intención necesita ser alineada con la frecuencia de bondad más alta que esté a su disposición. Antes de dejar su cama, siéntese, respire profundo, y con su mano en su corazón, lea lo siguiente:
“La Luz en mi está en congruencia con la Gran Luz. Mi propia Luz está en congruencia con el Dios Verdadero. Yo puedo experimentar la bondad de Dios en mi.
Me conecto con toda la Luz que Es.
Yo estoy ahora eligiendo alinear mi frecuencia con el Cristo Interno, con mi luz interna, con mi bondad interna.
Yo soy en la bondad de Jesús, y es la bondad de Jesús en mi.”
2. Deje su mano sobre su corazón, y extienda su otra mano hacia el Universo, sienta como logra tocar la frecuencia del amor y de la bondad, y permita que esta se haga manifiesta en ser, sienta como viaja desde su mano, baando hacia todo su ser a través de su braso hasta activar su cuerpo entero con la vibración de esta frecuencia sagrada.
3. Permítase sentirse completamente habitado por la bondad de Dios que usted hará manifiesta a través de sus acciones, sus palabras y sus pensamientos durante este día y los venideros.
4. Cuando sienta que su frecuencia personal está alineada con la frecuencia de la bondad, y que ambos están vibrando igual, puede bajar sus manos, y empezar su día irradiando bondad.
La Bondad de Dios es en Usted.