¿Cómo puede activarse la Alegría en nuestra vida, si no estamos dispuestos a aceptarla? ¿Es usted ese tipo de persona a la cual demasiada alegría y bienestar lo pone nervioso?
Para que la felicidad, y la alegría se activen en su ser, usted debe sinceramente querer ser feliz.
Hay gente que ha estado tanto tiempo deprimida, abatida e infeliz que, si de pronto se sintiera muy feliz, lo primero que haría es dudar y preguntarse: ¿No será malo sentirme tan contento? Están tan acostumbrados a la vieja forma de pensar que sostiene que la vida debe ser sufrimiento y obstáculos a pasar, que ¡ya no se sienten cómodos siendo felices y sintiendo la alegría! Pueden incluso, llegar a añorar el estado de depresión y de infelicidad de antes.
Muchas personas eligen la infelicidad alimentando las ideas tales como: «No voy a tener éxito», «Todo el mundo está en contra de mi», «Tengo miedo», «Todos los Negocios andan mal y se van a poner peor», ‘Siempre llego tarde», «El puede pero yo no», etc. Si tiene esta disposición de ánimo al despertarse, atraerá hacia usted todas esas experiencias y será muy desdichado.
Lo invito a ver que el mundo en el que vive está en gran parte determinado por lo que piensa y por los diálogos internos que sostiene.
Asegúrese de no entregarse a pensamientos negativos, derrotistas, ásperos o deprimentes.
El reino de la felicidad comienza en su pensamiento y en su sentimiento. La Alegría es un estado espiritual y de pensamiento.
Oración para Ampliar el Rango de Aceptación de la Alegría
Concéntrese en el área de su frente, puede poner su mano allí si así lo desea, y repita:
“Amado Creador de Todo lo Que Es, a partir de este momento, acepto los pensamientos positivos, alegres y optimistas.
Acepto dirigir mis capacidades mentales, mi inteligencia, mis facultades, lógicas, psíquicas y todas las que no conozco todavía, hacia admitir la alegría, la felicidad y el bienestar.
Acepto que mi mente se llene de luz, y salga de ella, una y otra vez, la aversión y el temor. Acepto la claridad y que mi mente y mis pensamientos, salgan de toda confusión. Acepto.
Respire profundamente y que esta aceptación fluya a través de su cuerpo, su alma, su mente y su corazón.
Concéntrese en el área de su garganta, puede poner su mano allí si así lo desea, y repita:
Acepto el poder de comunicar mi alegría y mi felicidad. Acepto comunicar mi propio poder personal y mi propia fuerza.
Acepto mi don de crear alegría hasta en los momentos más difíciles y comunicarme desde esa alegría con otros, acepto toda la alegría que no he podido expresar, acepto permitir que la vida y la alegría fluya a través de mi voz, acepto construir con lo que comunique desde esa alegría,
acepto callar lo que necesite callar, lo que me daña a mi o a otros. Acepto fluir.
Respire profundamente y que esta aceptación fluya a través de su cuerpo, su alma, su mente y su corazón
Ahora, concéntrese en el chacra de su corazón, el que está en medio de su pecho, puede poner su mano allí si así lo desea, y repita:
Acepto la alegría, la felicidad y la vida y acepto estar en este planeta, y plantar alegría, acepto mi misión desde mi corazón. Acepto lo que siento. Acepto fluir en mi alegría sin retener mis emociones a través de la aversión.
Acepto que mi corazón se abra. Acepto recibir amor, dar amor, recibir alegría, dar alegría, sentir todas las emociones y mantener mi corazón abierto en contacto con la alegría y con la vida.
Así es y hecho está. Gracias, gracias, gracias. Amén.”
Respire profundamente y que esta aceptación fluya a través de su cuerpo, su alma, su mente y su corazón