Dios es el origen de mi vida, quien continuamente me llena con sus cuidados y su amor. Nunca estoy sin su sustento. Cada una de mis células se abre para recibir Su luz.
Yo no busco afuera de mi para sentirme completa, pues yo soy completa en Él-Ella. Yo vivo en Él y Él vive en mi. Dios está más cerca de mi que mi propia respiración. Es es la luz de la compasión y la verdad en mi y el origen de mi fuerza y mi poder.